Sin duda, un vino magnífico para adentrarse en el universo personal de Peter Sisseck, uno de los elaboradores que más ha hecho por la denominación ribereña en los últimos tiempos. Un vino con el que este gran enólogo busca ofrecer un perfil de vino más fresco y frutal, sin la concentración que caracteriza a sus codiciados Flor de Pingus y Pingus.
PSI 2021 (Magnum)
